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  Como bien sabéis, este mes de octubre me puse como reto leer la saga completa de Víctor Ros de Jerónimo Tristante y así lo hice.
   Tras completar la lectura de los 6 libros y hacer sus respectivas reseñas individuales me gustaría realizar una de la saga en general. Así que allá vamos.
   Lo mejor para empezar es analizar al personaje. Víctor Ros es un hombre con un gran don qué consiste en la observación. Es una persona que se fija en cada mínimo detalle, cosa que para su trabajo es muy beneficioso, eso junto con la gran intuición que posee le hacen ser un gran investigador aunque a ojos de los demás pueda parecer un loco y un excéntrico. Es, sin lugar a dudas, el Sherlock Holmes español.
     A medida que van pasando los años y va resolviendo casos, nos vamos encontrando con un Víctor cada vez más humano. Mientras que en el primer libro nos encontramos con una persona que controla por completo sus emociones, muy racional y que siempre hace lo correcto en el último nos topamos con un Víctor más humano y visceral.
    Durante la lectura de la saga, ha habido altibajos. Si bien todos me han enganchado no todos lo han hecho al mismo nivel. Cuando leí El misterio de la Casa Aranda me gustó muchísimo pero en los tres siguientes  ( El caso de la viuda negra, El enigma de la calle Calabria y La última noche de Víctor Ros) eché en falta esos giros que tanto me gusta encontrar en este tipo de lecturas. Pero, cuál fue mi sorpresa, que en la lectura de  Víctor Ros y el gran robo del oro español,  cuando no lo esperaba, aparecieron de golpe todos esos giros que anteriormente habían faltado. Fue una lectura apasionante en la que la sorpresa final fue magistral. 
    El más flojo, aunque no por ello menos interesante, desde mi punto de vista, ha sido Víctor Ros y los secretos de ultramar. Volví a echar en falta su efecto sorpresa pero, aún así, ha sido una lectura muy entretenida.
     ¿Recomendaría la lectura de esta saga? Por supuesto que sí, desde el primero al último, porque en ellos he encontrado pinceladas de historia del siglo XIX que nos muestra la situación política y la sociedad de España, Inglaterra y Cuba e incluso de las tensiones con EEUU por la las tierras cubanas, pero sin llegar a restarle ni un ápice de interés a la trama ni desviar la atención de la historia. He hallado misterio, amor, momentos de risas e incluso de llanto. Creo que el autor ha sabido plasmarlo todo de tal manera que te atrapa, con unos villanos a la altura del protagonista, gran parte de ellos fríos y calculadores. 
   Y dicho todo esto, solo me queda decir que espero que el autor siga atrapándome con una nueva aventura de este gran detective.


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